Queridos amigos:
Me gustaría explicaros por qué me incorporé al partido político “Por un Mundo más Justo” y presentarme a título personal. Soy Ramiro Viñuales Ferreiro, nacido en Madrid pero de padres y abuelos de Avila, Lugo, Salamanca, Valladolid y Jaén. Tengo 33 años, estoy casado con Marta y tengo dos niños pequeños, Yago y Adrián.
Estudié la carrera de Derecho en la Complutense con la vocación de llegar algún día a ser Juez, pues algunos antepasados míos lo habían sido y eran un ejemplo para mi. Mi deseo era poder intentar ser “justo”, hacer justicia. La verdad es que esa vocación se fue poco a poco reorientando hacia el sector social. Así, una vez finalizados los estudios, y viendo cómo era la situación de la población inmigrante en España, hice un curso de especialización en extranjería y durante un año trabajé en un despacho profesional como abogado ayudando en la tramitación de expedientes administrativos de extranjería, en definitiva, ayudándoles con los “papeles”. Una gran experiencia.
Pero tenía el gusanillo de conocer algún país del tercer mundo. A través de un amigo sacerdote, que vive como misionero en México desde hace muchos años, conocimos una realidad diferente a la nuestra, a la del barrio, a la del entorno. Así que nos marchamos mi mujer y yo a una experiencia de voluntariado en el sur a la selva de Venezuela por medio de una Organización No Gubernamental de Desarrollo.
Ya tenía todo más claro. Desde ese año, 1999, hasta hoy, he estado vinculado profesionalmente al sector no lucrativo de la cooperación para el desarrollo, trabajando en diferentes organizaciones que me han permitido conocer de primera mano la situación de muchas personas en Kenia, Bolivia, Venezuela y Nicaragua.
En todas estas vivencias, he conocido el esfuerzo ímprovo de personas y colectivos en ayudar y acompañar al pobre en su camino, y también he percibido la necesidad de actúar desde la política como herramienta principal en la solución de la pobreza en el mundo.
Por amistad personal con el presidente, conocí esta iniciativa antes de su constitución pero no fue hasta el año pasado cuando me afilié y me incorporé como Secretario de Estudios del partido con la idea de plasmar una línea de trabajo enfocada en cuatro vertientes: conocimiento de la realidad de la pobreza, elaboración del programa electoral, desarrollo de iniciativas legislativas y proceso de formación interna, que nos permitan generar propuestas reales y efectivas a los poderes públicos españoles y europeos y a los organismos internacionales.
Contamos con un equipo humano y profesional altamente capacitado, muy variado y con un objetivo común, con ganas e ilusión de ayudar a que de una vez por todas, sin solución de continuidad, hagamos de este mundo un buen lugar donde vivir.
Os animo a que sigáis nuestra evolución, a que miréis de reojo nuestro trabajo, a que lo analicéis y lo critiquéis e incluso a que os animéis e incorporéis, por qué no, a conseguir un mundo más justo.
Me gustaría explicaros por qué me incorporé al partido político “Por un Mundo más Justo” y presentarme a título personal. Soy Ramiro Viñuales Ferreiro, nacido en Madrid pero de padres y abuelos de Avila, Lugo, Salamanca, Valladolid y Jaén. Tengo 33 años, estoy casado con Marta y tengo dos niños pequeños, Yago y Adrián.
Estudié la carrera de Derecho en la Complutense con la vocación de llegar algún día a ser Juez, pues algunos antepasados míos lo habían sido y eran un ejemplo para mi. Mi deseo era poder intentar ser “justo”, hacer justicia. La verdad es que esa vocación se fue poco a poco reorientando hacia el sector social. Así, una vez finalizados los estudios, y viendo cómo era la situación de la población inmigrante en España, hice un curso de especialización en extranjería y durante un año trabajé en un despacho profesional como abogado ayudando en la tramitación de expedientes administrativos de extranjería, en definitiva, ayudándoles con los “papeles”. Una gran experiencia.
Pero tenía el gusanillo de conocer algún país del tercer mundo. A través de un amigo sacerdote, que vive como misionero en México desde hace muchos años, conocimos una realidad diferente a la nuestra, a la del barrio, a la del entorno. Así que nos marchamos mi mujer y yo a una experiencia de voluntariado en el sur a la selva de Venezuela por medio de una Organización No Gubernamental de Desarrollo.
Ya tenía todo más claro. Desde ese año, 1999, hasta hoy, he estado vinculado profesionalmente al sector no lucrativo de la cooperación para el desarrollo, trabajando en diferentes organizaciones que me han permitido conocer de primera mano la situación de muchas personas en Kenia, Bolivia, Venezuela y Nicaragua.
En todas estas vivencias, he conocido el esfuerzo ímprovo de personas y colectivos en ayudar y acompañar al pobre en su camino, y también he percibido la necesidad de actúar desde la política como herramienta principal en la solución de la pobreza en el mundo.
Por amistad personal con el presidente, conocí esta iniciativa antes de su constitución pero no fue hasta el año pasado cuando me afilié y me incorporé como Secretario de Estudios del partido con la idea de plasmar una línea de trabajo enfocada en cuatro vertientes: conocimiento de la realidad de la pobreza, elaboración del programa electoral, desarrollo de iniciativas legislativas y proceso de formación interna, que nos permitan generar propuestas reales y efectivas a los poderes públicos españoles y europeos y a los organismos internacionales.
Contamos con un equipo humano y profesional altamente capacitado, muy variado y con un objetivo común, con ganas e ilusión de ayudar a que de una vez por todas, sin solución de continuidad, hagamos de este mundo un buen lugar donde vivir.
Os animo a que sigáis nuestra evolución, a que miréis de reojo nuestro trabajo, a que lo analicéis y lo critiquéis e incluso a que os animéis e incorporéis, por qué no, a conseguir un mundo más justo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario